Las puertas correderas son una solución versátil y funcional para entornos residenciales, comerciales, industriales y sanitarios donde se requiere un acceso fluido y un aprovechamiento óptimo del espacio. Su sistema de apertura lateral permite prescindir de bisagras, evitando la invasión de áreas útiles y facilitando el paso continuo de personas y vehículos.
En viviendas, son una opción estética y práctica para accesos a jardines, terrazas o garajes, combinando seguridad y comodidad. En locales comerciales y oficinas, su diseño favorece la visibilidad y la accesibilidad, mejorando la experiencia del cliente y optimizando el tránsito. En hospitales y clínicas, permiten un cierre hermético y sin contacto, asegurando higiene y facilidad de acceso para camillas y personal médico. En entornos industriales, su resistencia y automatización facilitan el movimiento de mercancías y vehículos de carga.
Fabricadas en materiales como vidrio, aluminio o acero, las puertas correderas pueden personalizarse para adaptarse a diferentes necesidades, incluyendo aislamiento térmico y acústico, cerraduras de seguridad y sistemas automatizados con sensores de movimiento o control remoto. Su combinación de diseño, funcionalidad y tecnología las convierte en una de las opciones más utilizadas en cualquier sector.